Cada vez que pensamos en una orquÃdea se nos viene a la mente una planta con bellas flores delicadas, exóticas, de gran variedad de colores, difÃciles de cultivar, etc. También las asociamos al verano cuando hay exposiciones de estas plantas llenas de flores que nos dejan boquiabiertos y con ganas de tener una en casa. Su cuidado no es tan difÃcil como hemos creÃdo usualmente. Eso sÃ, es importante conocer algunos factores básicos para poder disfrutarlas exitosamente.
Las orquÃdeas constituyen un grupo muy grande y variado de plantas epifitas. Esto quiere decir que no son parásitas sino que viven sobre otra planta sin alimentarse de ésta y sin causarle daño. Es muy común verlas sobre los troncos de los árboles. Su atractivo principal son las flores de diferentes tamaños, formas y colores. En Costa Rica existe una gran variedad de orquÃdeas y se encuentran alrededor de todo el paÃs.
Los órganos de las orquÃdeas
Generalmente tienen los mismos órganos que cualquier otra planta: raÃz, tallo, hojas, flores y frutos. La raÃz es la que fija y sostiene la planta además de absorber el agua y los nutrientes por lo que no se deben cortar las que sobresalgan mientras se vean carnosas. Solamente se deben eliminar las que se vean secas, arrugadas o podridas.
El tallo es el órgano donde se acumula mucha agua y nutrientes; además sostienen las hojas y en algunos casos, las flores y los frutos. Hay otro tallo llamado rizoma del que salen las raÃces y los pseudo bulbos y el cual crece a lo largo del sustrato o tronco donde esté sujeta la orquÃdea. En los pseudo bulbos se forma la bráctea, que es una cascarita seca y se debe eliminar para que no se acumulen insectos.
Las hojas son órganos con clorofila, el pigmento verde capaz de absorber la luz en el proceso de fotosÃntesis. En éstas se fabrican los alimentos para el desarrollo de la planta por lo que deben permanecer con luz aunque sea en pequeñas cantidades y debe cuidarse que no le dé el sol directamente ya que las puede quemar. Hay hojas carnosas que almacenan agua y otras delgadas. La espátula es un tipo de hoja de donde sale la flor en orquÃdeas como la Phalaenopsis. Las brácteas son otro tipo de hoja que cubre los tallos y que al secarse debe de ser eliminada para evitar que se alojen insectos u hongos.
En los frutos es donde se forman millones de semillas después de la fecundación.
Las flores de las orquÃdeas tienen una estructura muy simple: 3 sépalos (partes externas), 3 pétalos (partes internas) y una columna. Hay dos sépalos idénticos y un tercero más grande y diferente al que se le llama labelo. Es muy llamativo por sus formas y colores variados. La columna se encuentra en el centro del labelo y es la parte menos llamativa de la flor. Generalmente las flores se producen en el pseudo bulbo más joven.
La mayorÃa de las orquÃdeas crece en forma monopodial o simpodial. El más común es el simpodial (Ej. La Cattleya) que tiene varios tallos o pseudo bulbos los cuales pueden ser alargados, redondos, carnosos o leñosos. Este tipo crece hacia los lados sobre un tronco o sustrato. Además, tienen un rizoma del cual brota un nuevo tallo. El otro tipo de crecimiento es el monopodial; en este el tallo crece verticalmente añadiendo hojas nuevas hacia arriba (Ej. Vandas, Phalaenopsis). Estas no crecen hacia los lados.
Su cultivo es muy fácil aunque la gente piense lo contrario, siempre y cuando se cultiven en su hábitat natural o se les procure un ambiente similar. Es muy importante no tratar de cultivarlas en condiciones que no sean similares a las que estas necesitan. Escoja plantas que se adapten bien al clima donde usted vive. Generalmente las plantas que proceden de zonas bajas se adaptan bien en zonas de mayor altura, mientras que por el contrario, las que proceden de zonas más altas no se adaptan adecuadamente a alturas menores por lo que probablemente no florearan.
Tipos de orquÃdeas
De izquierda a derecha: Phalaenopsis, Cattleya, Vanda, Cymbidium y Dedrobium.
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